La tecnología como una herramienta para la innovación, no un requisito.

La crisis sanitaria ocasionada por el Covid-19 aceleró la incipiente transformación digital en todo el mundo. Los países se vieron obligados a cambiar los modelos de negocios para satisfacer las nuevas necesidades de los consumidores frente a la pandemia. Dicho de otra forma, se vieron obligados a innovar. 

La innovación tecnológica se refiere al proceso donde una empresa crea un producto, servicio, proceso, modelo de negocios o mejora de manera notoria las características de uno ya existente utilizando las nuevas herramientas tecnológicas.

Por lo general es el creador o fundador de la empresa la persona encargada de la innovación o adaptación del rubro frente a las dificultades. Es sobre quien recae el peso de reinventarse con proyectos y soluciones que beneficien a su marca. 

Pero la innovación no debe estar asociada a una sola persona, que por lo general es el dueño o creador, sino que es importante entender que la innovación debe ser una función esencial dentro de la empresa y que abarca más allá que solo la utilización más eficaz de las nuevas herramientas digitales. 

La anterior definición sobre la innovación tecnológica puede dar a entender que para innovar es requisito poseer un gran número de herramientas tecnológicas. Esto no necesariamente es así, las herramientas ayudan y facilitan el camino al objetivo, pero no son un requisito. 

El hecho de que una empresa que posee herramientas tecnológicas avanzadas, como softwares y aplicaciones pueda innovar de manera exitosa, no significa que una pyme o startup emergente, que no posee los mismos recursos tecnológicos, no pueda innovar. 

Por el contrario, existen ventajas comparativas de cada uno de los casos, donde la clave para entender cómo abordar el tema está en la base, las personas, sus problemas, necesidades y oportunidades. Esto último sumado a las herramientas digitales de mis activos nos darán un resultado mucho más completo, pues esta manera de ver la innovación no implica olvidar y dejar de lado las nuevas tecnologías, sino aprovechar todo como un conjunto. 

Es por ello que invitamos al lector a abrir la mente, la visión, a pensar diferente y encontrar las oportunidades que existen en lugares donde antes no se buscó. Desde Espacios Vacíos buscamos que sea el usuario o grupo quien encuentre las oportunidades y soluciones colaborativas dentro de sus propias capacidades al interior de las organizaciones o proyectos. 

Muchas veces las oportunidades están frente a nuestros ojos, poseemos un gran capital humano, de personas llenas de ideas, talentos y conocimientos que pueden aportar de manera significativa a la innovación de la empresa u emprendimiento, solo hay que tomarse el tiempo de aprovechar los recursos que tenemos a nuestra disposición.